sábado, 11 de mayo de 2019

'NUESTRAS VOCES': Capitalismo y revolución

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sábado  11  de  mayo  de  2019

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Capitalismo y revolución













El término Revolución implica un punto exterior desde donde se transformará desde la raíz el orden dominante.En el capitalismo contemporáneo ese punto exterior no tiene lugar. La hipótesis de la Emancipación se ha vuelto una apuesta que ya no se resuelve sólo con una organización política sino con una serie de posiciones en las que el propio sujeto debe estar implicado.
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Por             JORGE  ALEMÁN
Publicado en      La Tecl@ Eñe


El término Revolución implica un punto exterior desde donde se transformará desde la raíz el orden dominante. Esto exige un comienzo absoluto, una ruptura radical con lo anterior y una definición exacta del mundo posterior que va advenir.  La última vez que esto tuvo lugar en occidente implicó la violencia armada.  La misma no funcionó de modo eficaz, especialmente después de las revoluciones socialistas históricas los grupos de la «lucha armada», por heroicos que fuesen en sus primeras tentativas, fracasaban, y no sólo por la asimetría con respecto a aquello que se enfrentaban, sino que las armas no cumplían meramente una función instrumental.  No eran un útil, los militantes en muchos casos se volvían sujetos de las armas y no al revés. Esto derivaba inevitablemente en una lógica sacrificial.  Por lo menos en la perspectiva occidental ya que al yihadismo no le impone barrera alguna el asunto del sacrificio.

En el capitalismo contemporáneo, por distintas razones estructurales en su peculiar composición, ese punto exterior no tiene lugar. Se trata de volverse hacia una nueva problemática, como salir de aquello que en principio carece de exterior. Es precisamente lo que Heidegger designó con el nombre de Metafísica. ¿Qué rendijas o resquicios desde el interior mismo del capitalismo pueden alentar a la hipótesis de la Emancipación? Esto ya no se resuelve sólo con una organización política sino con una serie de posiciones en las que el propio sujeto debe estar implicado. A saber: Las elecciones coyunturales políticas con las que se milita jamás coincidirán con una teoría donde exista una concurrencia plena entre ambos lugaresEl sujeto embarcado en una apuesta política no puede decepcionarse ni deprimirse ni pensar en términos de utilidad. La fidelidad a una causa nunca entrega una satisfacción plena. En definitiva, la hipótesis de la Emancipación se ha vuelto una experiencia con la condición irrealizable del deseo y no con la ensoñación narcisista de los ideales del yo.

El nuevo militante no tiene la coherencia como refugio ni la apelación a ecuaciones teóricas que sólo circulan en un medio con el fin de constituir una identidad para los otrosSu único suelo es la insistencia en una justicia poética que sólo emerge en instantes que no se explican de inmediato.

Hace años que mis elecciones políticas no se reflejan de modo directo en mis desarrollos teóricosEsta tensión, esta división irreductible, no sólo no me parece un déficitEs la señal más clara que la inmersión en las encrucijadas de nuestra época no da lugar a un trascendentalismo estéril. Tal como lo dijo el pensador, lo importante llega de modo imprevisible pero lo imprevisible tarda mucho en prepararse.








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