Por Redacción Para: Letra P
Esto se dio no sólo por el número de manifestantes que se marcharon hacia las puertas de la Gobernación y la Legislatura (la organización habla de 50 mil) sino por el amplio abanico gremial que aunó sus voces convirtiéndolas en un hondo grito de malestar ante la ausencia de respuestas en materia de incremento salarial y mejoras en las condiciones de trabajo, como así también en rechazo de la emergencia administrativa que, hacia el epílogo de la demostración de fuerza sindical, se terminó de consumar en el recinto de la Cámara baja.
El grueso cordón de manifestantes (que abarcó en su marcha hacia plaza San Martín casi siete cuadras de largo, ocupando ambos carriles de la avenida 7), tuvo su primera parada frente al Palacio Legislativo, donde se montó un pequeño escenario sobre el cual se comenzó a escuchar la primera batería de reclamos dirigidos puntualmente a los diputados que se aprestaban a tratar el proyecto de Ley de Emergencia Administrativa y Tecnológica, catalogada por los sindicatos como una “herramienta de precarización laboral” promovida por el Ejecutivo.
LA ALIANZA. Aquí, se cargaron las tintas contra los legisladores del massismo que, como se preveía, acompañaron la iniciativa del oficialismo: “Algunos que hablan de oposición responsable están dispuestos a votar en contra de los trabajadores por migajas del poder”, fustigó el secretario General Adjunto de ATE bonaerense, Carlos Díaz, quien apuntó así contra “la alianza de Cambiemos y el Frente Renovador”.
Minutos después, el reclamo se trasladó al escenario central montado frente al acceso central a la Casa de Gobierno bonaerense, copando la multitud gran parte de la extensa plaza que divide la sede gubernamental bonaerense del Palacio Legislativo. Previo al comienzo de las alocuciones, diputados del Frente para la Victoria, entre los que se divisaron a Eduardo Torres y Juan Manuel Cheppi, se acercaron a manifestar su apoyo a la marcha y el rechazo a la Emergencia Administrativa que se aprobaría minutos después por mayoría.
“No nos hacemos cargo del Estado de Scioli pero tampoco nos hacemos cargo del Estado de Vidal que quiere terminar de rematarlo”, disparó el titular de ATE provincial, Oscar de Isasi, quien también se acordó del massismo: “La historia los juzgará como cómplices”.
Quien fue por más en este aspecto fue el secretario General del Sindicato de Obreros y Empleados de Minoridad y Educación (SOEME), Marcelo Balcedo,quien relató: “En este momento están bajando al recinto (de Diputados) los traidores del Frente Renovador”, para luego ahondar en duros calificativos hacia los legisladores massistas y calificar a la administración Vidal como un “Gobierno de mentirosos tramposos y miserables”.
Por otro lado, y en declaraciones a Letra P, el titular de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB), Pablo Abramovich, señaló: “A pesar de que la gobernadora Vidal siga planteando en los medios de comunicación que el conflicto es chiquito, que es sólo del 8 por ciento de los trabajadores del Estado, esta es la mejor demostración de que hay dos provincias, una la que ve la gobernadora y su equipo de comunicación, y otra la que sucede en las calles, en las plazas y en las dependencias del Estado”.
Y añadió: “Claramente el conflicto se generaliza, varios sindicatos seguimos profundizando medidas de fuerza. La gobernadora está a tiempo de modificar la actitud de que la provincia no se le siga prendiendo fuego y que tiene que suspender el tratamiento de la emergencia administrativa que perjudica la carrera y la estabilidad de los estatales y tiene que convocar a paritarias y hacer un ofrecimiento acorde con el incremento de los precios”.
CONSIGNAS QUE UNEN. Catalogando la marcha como “un dato político histórico”, Oscar de Isasi señaló a Letra P: “Somos miles de trabajadores del Estado, más de 50 mil, presentes en la plaza defendiendo el salario, la fuente laboral, contra la ley de ajuste, esta ley de emergencia administrativa que lo único que quiere es desguazar el Estado y precarizar las relaciones laborales a riesgo de perder las fuentes de empleo. Estas consignas unificaron a todos los estatales.
“Es un hecho político de alto nivel, porque asumimos la responsabilidad las conducciones de los gremios de no ser hipócritas primero, seguir teniendo los debates que tenemos pero esos debates no pueden trabar nunca un proceso de unidad y masividad para detener el ajuste que está planteando la gobernadora Vidal”, agregó para advertir que el gobierno de Cambiemos “evidentemente está utilizando el consenso de la elección para hacer políticas totalmente distintas a las expectativas de la gente que los votó”.
NUEVA MOVILIZACIÓN. De seguir sin respuestas por parte del Ejecutivo, y con el dato reciente de la aprobación de la Emergencia Administrativa, De Isasi adelantó: “Seguramente en junio (posiblemente viernes 3) vamos a construir una gran marcha de los bonaerenses para poder ponerle freno a una política que perjudica a la mayoría de los trabajadores y de la sociedad”.
En la misma línea fue Abramovich: “Para el mes de junio nos vamos a volver a juntar los gremios que hoy estamos protagonizando y vamos a volver a convocar al resto de los gremios que no están acá para garantizar una gran movilización sin perjuicio de lo cual cada sindicato está definiendo en sus ámbitos orgánicos la continuidad de las medidas de fuerza para las semanas que viene y para la siguiente hasta que lleguemos a esa gran movilización que seguramente será más grande que la de hoy”.
Entre otras entidades gremiales, participaron ATE, SUTEBA, FEB, UDOCBA, SOEME, SADOP, AJB, la Federación Nacional Docente, AMET, AEMOPBA, SUPTTIOMA, SIPOBA, la Comisión Gremial del BAPRO, ASOMA, Conductores de Taxi, AMRA, FULP y CICOP.
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