lunes 04 de julio de 2016
Cómo mejorar la vida de la persona con Alzheimer
"Uno se da cuenta de que ha terminado la juventud cuando uno no está en ninguna parte. Los jóvenes están en lugares, y las personas que han dejado de serlo ya empiezan a estar ausentes".
Alejandro Dolina
Por Ignacio Brusco * @brusco_n
Alejandro Dolina
Por Ignacio Brusco * @brusco_n
Existen varias técnicas terapéuticas que utilizan estrategias no farmacológicas para mejorar los trastornos cognitivos, tanto para retrasar cualquier problema cognitivo como para demorar la evolución de la enfermedad de Alzheimer o de otros trastornos intelectuales. El día 2 de junio fui invitado al IV Simposio Internacional sobre Avances en la Investigación Sociosanitaria en la Enfermedad de Alzheimer realizado en Salamanca, organizado por el Centro CRE (Centro de Referencia Estatal de Atención a Personas con Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias de Salamanca) que funciona para todo el país ibérico, con la Argentina como país invitado. Este evento tiene el auspicio de la Fundación Reina Sofía, organización destinada al estudio, tratamiento y apoyo de familiares de pacientes que padecen la enfermedad.
El Alzheimer es la enfermedad crónica no infecciosa más discapacitante y, además de constituir un problema individual familiar y social de importancia, va en franco aumento dado que el factor de riesgo más relevante es el envejecimiento poblacional. Sumado a esto, aumenta el gasto en salud diez veces en pacientes mayores. Sin embargo, son pocos los países (aun dentro de los desarrollados) que dedican importantes recursos esta enfermedad en proporción a la gravedad de costos que ella representa. Estados Unidos ha incrementado de 500 a 1.000 millones de dólares el presupuesto de investigación en Alzheimer este año. También España, que ha creado el ya mencionado centro de referencia, dependiente del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad de ese país. Allí se generan paradigmas de tratamiento para retrasar la evolución de la enfermedad, pero a la vez mejoría en la calidad de vida, aumentando la estimulación a partir actividades que la persona desea (lo que los directivos llaman acertadamente un "menú a la carta") con el objetivo de mejorar y dignificar su situación, haciendo lo mismo con su emoción y su ego. Estos mecanismos psicológicos también mejoran el proceso físico actuando biológicamente y, en el mejor de los casos, retrasando el comienzo y la evolución de los enfermos.
El trabajo realizado consiste en nuevas metodologías asistenciales personalizadas e interdisciplinarias con mucho personal por paciente, gran capacidad estructural y amplitud de espacio, donde lo afectivo tien un rol fundamental. Esto permite el desarrollo de trabajos innovadores e intersubjetivos con los profesionales de la salud especializados, como zooterapia con perros para estimulación sensorial, musicoterapia, danzaterapia y artes plásticas.
Como invitados, hemos transmitido nuestra experiencia en un intercambio muy fructífero. Se comunicó la importancia de los trastornos en ritmos biológicos y del sueño en los pacientes con demencias. La luz constituye una característica básica en el tratamiento no farmacológico de los trastornos cognitivos y es clave para la disminución de psicofármacos. Esto fue recomendado en instituciones de internación en una ciudad con alta experiencia en el tema como Viena, y lo hemos estudiado en nuestro Centro de la Facultad de Medicina de la UBA y en la Asociación Alzheimer Argentina. La no utilización de antipsicóticos permite reducir a la mitad el riesgo de mortalidad.
* Neurólogo. Doctor en Medicina y doctor en Filosofía
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